LAS
HERRAMIENTAS INTERACTIVAS EN EL PROCESO EDUCATIVO
Las herramientas interactivas, son los implementos utilizados por las
personas para llevar a cabo una serie hechos que mejoran la capacidad de las
instituciones y optimizan su desempeño, lo que ha ido perfeccionándose a través
del tiempo mediante un desarrollo vertiginoso, que afecta las diferentes
instituciones a nivel mundial y la educación no escapa de ello. Al respecto,
cabe citar a Astroza (2008) quien expresó:
“Los potentes cambios sufridos por la sociedad,
posibilitados por el desarrollo tecnológico y científico, específicamente por
las tecnologías de la información y la comunicación, también han afectado
fuertemente a la educación. Los nuevos esquemas culturales han logrado permear
fuertemente a las instituciones educativas, las cuales habían permanecido
invulnerables a través de la historia a una serie de cambios sociales,
políticos y tecnológicos. La resistencia natural a los cambios manifestada
desde siempre por la institución educativa ha ido viéndose acorralada frente a
la desnaturalización de la función de la escuela, la cual al alejarse de los
nuevos requerimientos transforma su enseñanza en letra muerta y añeja, marcando
una distancia entre las necesidades reales de los estudiantes y los saberes
estimulados desde la escuela”. (p.10)
En este sentido, es pertinente tomar una aproximación conceptual de la
Tecnología Educativa, acorde a sus finalidades y congruente con la sociedad
actual. Esto sirve para justificar el desarrollo de cualquier plan de acción
relacionado con la implementación y manejo de las herramientas interactivas en
Educación.
Desde esta misma óptica, las Tecnologías, deben suponer una respuesta
teórico-práctica que permita el diseño, análisis, selección, aplicación y
evaluación coherentes de recursos especializados aplicados al proceso de
enseñanza-aprendizaje. Sin embargo, el ámbito educativo es el más atenuado, lo
cual ha traído como consecuencia el bajo rendimiento estudiantil (sobre todo en
la lectura y operaciones matemáticas básicas) y el escaso razonamiento en
cuanto a los procesos lógicos, los cuales evidencian un fracaso en los sistemas
actuales de aprendizaje. Esto, ha
afectado de igual modo la práctica docente y por lo tanto se hace necesario
corregir estas debilidades mediante un cambio sustancial del proceso educativo
y curricular que analice, mejore, potencie, desarrolle, y automatice el hecho
educativo para construir una relación efectiva entre los actores del hecho
social formativo donde puedan converger los docentes, estudiantes y la
comunidad en general. Sin embargo, el ámbito educativo es el más atenuado.
